FOTOGRAMAS: DEATH PROOF (2007) de Quentin Tarantino

Puede que esta película, un mero divertimento desbocado en el que muchos intentaron buscar el oro y el moro, no aportase gran cosa a la historia del cine (su idea de restaurar los programas dobles derivó en fracaso) ni a la obra de su director (una parada indeterminante en su evolución autoral y artesanal). Pero al menos, sí sirvió para, de algún modo, relanzar a un Kurt Russell al que llevábamos tiempo sin ver el pelo (aunque lejos de la resurrección que le supuso a Travolta el trabajo con el director), y para contribuir al desencasillamiento de Rose McGowan, junto a su protagonismo absoluto en Planet Terror, la otra mitad del proyecto. La vuelta de un héroe de acción de la vieja escuela, y una dulce estrella televisiva que empieza a buscar su lado más guerrero para avanzar hacia papeles, no más serios, pero sí, digamos, más adultos.

Una obra en el que prima el estilo por encima de la redondez del relato, del discurso y por supuesto del mensaje. Para tal menester, el propio Tarantino decidió pluriemplearse como director de fotografía, para imprimirle directamente, de su propia mano, ese estética pulp, edulcorada, sureña y casi trash que presenta la película, para la cual se sirve asimismo de la emulación del rollo de película antiguo y de mala calidad. Se trata de la única película del cineasta en la que él mismo se queda a cargo del departamento de foto, aunque en su relativamente breve apenas ha repetido colaborador en esa sección (al contrario que en el montaje, donde siempre trabajó codo con codo con la malograda Sally Menke, una de sus mejores aliadas y supuesta “culpable” de cambio de última hora que a la postre hicieron grandes a sus película). Para ser más específico, ha trabajado hasta con tres “genios de la lámpara” distintos, de perfiles bien variados: el polaco Andrzej Sekula (Reservoir dogs, Pulp fiction y su fragmento en Four rooms), el mejicano Guillermo Navarro (Jackie Brown) y el norteamericano Robert Richardson (Kill Bill y Malditos bastardos).