EL LEGADO DE UN GENIO – 'PASOLINI', de Abel Ferrara

PASOLINI (2014) de Abel Ferrara

Encuentro argumentos suficientes para considerar la película de Abel Ferrara envolvente y, a ratos, incluso fascinante. También considero, por otra parte, que 86 minutos de duración son lo bastante ajustados como para no permitirse el lujo de caer en el tedio, algo que ocurre en Pasolini, no con demasiada frecuencia, pero sí más de lo debido. Me quedo con la recreación de los últimos escritos del genio italiano antes que con los apuntes biográficos que ofrece la película, que aportan más bien poco a cualquier espectador que conozca mínimamente la figura del retratado. Yo mismo no me considero un gran experto en Pier Paolo Pasolini, pero sé lo suficiente como para que no me sorprenda nada de lo que me cuentan.

Willem Dafoe da vida al director italiano con sobriedad y sin estridencias innecesarias, ciñéndose a un guión austero que podría fragmentarse en tres bloques: la vida personal y familiar de Pasolini, su obra explicada a través de entrevistas con la prensa y la película que nunca llegó a rodar y que Abel Ferrara reconstruye para nosotros. Como he señalado anteriormente, la más interesante es la última. Y no porque el estadounidense sea un buen imitador del italiano, al contrario, vistas las escenas uno se inclina a pensar que Pasolini se habría llevado las manos a la cabeza de haberlas visto, pero hay algo reconfortante en descubrir que la idea de un hombre hace 40 años mantiene hoy en día toda su furia y su espíritu provocador.

Un hombre persigue la estela de un cometa que anuncia el nacimiento del Mesías y acaba su viaje observando la Tierra desde el espacio, resignado, anunciando que el fin no existe y que lo único que queda es esperar, pues algo acabará sucediendo. Más o menos ese es el resumen de la obra inédita de Pasolini que, por supuesto, yo cuento con mucha menos gracia que él o que Abel Ferrara. Una idea a priori algo delirante, como lo eran con frecuencia sus ideas, teñida, como no podía ser de otra forma, de sexo explícito y político, pues como el propio director explica en la película, todo es político, incluso el sexo.

Me quedo, pues, con sentimientos encontrados. Por un lado, desearía haber conocido más detalles de la vida de un hombre que desafió a las instituciones religiosas y políticas y alertó a quien quisiera escucharle que corríamos un gran peligro. Por otro lado, me gusta que Pasolini, la película, no pretenda hacer que Pasolini, el hombre, nos caiga bien ni mal, sino que lo valoremos por su obra y su espíritu osado y rompedor.

Ficha técnica